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Frases de Melendi - Disco Volvamos a Empezar

Lucho hasta la muerte, lucho muerto en vida, lucho porque hay muchas bocas y poca comida.

Somos de lo que no hay ya en el universo, somos una poesía con pasíón pero sin versos.

Lucho por la inteligencia y también por la ignorancia cada vez más convencido que es muy corta su distancia.

No sé qué haces siempre metida en mi sangre, ya he probado el fondo y no me gusta como sabe.

Y aunque en nuestro tablero yo sea tu rey sabes que yo tengo el corazón de peón. Me gusta mucho más romper la ley que dictarla mi amor.

Otra vez, el reloj se ha parado otra vez y yo empiezo a sentirme pequeño como siempre colgando de un sueño.

Y a veces una jaula nos da la libertad, probablemente de la jaula que hablo sea un bar.

Somos soldados en primera línea somos sólo soledad.

El sueño de quererte dejar de ser inerte, de ser tu Robinson y de que tu seas mi viernes.

Me cogiste cuando apenas era un niño entregándome dos alas pa volar, yo firmé sin leer la letra pequeña donde ponía la ostia que me iba a pegar

Quiero venir cuando tú vayas y ver mi nombre en tú diario.

Si soy cariñoso dices que te agobio, si me alejo un poco que paso de ti si te hago un regalo dices que te compro y si no lo hago tengo algo por ahí.

De cada movimiento que decidas dar pues cada paso en falso lo daré contigo.

Perdóname ángel por lo que te he hecho, sabes mejor que nadie lo mucho que te quiero.

Mi teléfono no suena supongo que eres tú, dándome las de arena tapándome la luz.

No prenden las luces de mi lado oscuro, mi mayor pecado no dejar ninguno.

La luz que tú me diste la luz que me arropaba por eso mis palabras salen ensangretadas. Mira que me advertiste si que tu amor no era ciego no y yo haciendo oidos sordos y ahora a empezar de cero.

Y unos no saben lo que dicen y otros no dicen lo que saben no lo dicen no.

Con el tiempo solo me fui dando cuenta que lo raro no era lo de los demás y que tu eres sin dudar un arma blanca más dañina que ninguna de metal.

No quiero bailar con la pena porque me da miedo pisarla.

Somos dos polos cuatro estaciones somos la repercusión de nuestras acciones.

Somos reyes somos gitanos por morder una manzana a veces hasta gusanos.

Y aprieta fuerte que ya asoma la cabeza: es una idea redonda casi perfecta.

Cierra los ojos piensa en los demás tú no sufres solo quiérete algo más.

No quiero saber por diablo lo que por viejo se me escapa.

Somos una enfermedad de la que no se sabe cura, somos virus que estornudan y estudian literatura.

Y dice mi loquero que qué es lo que quiero si sólo le doy a mi vida cornadas, que andando siempre en camiseta de tirantes jamás podré tener un as en la manga.

Hoy es el día de la melancolemia, de ahogar tus besos en quintos de cerveza.

No conozco mandamientos más allá de mis narices por eso llevo remiendos en el alma y cicatrices.

Somos como corderitos persiguiendo religiones sin saber que la verdad se encuentra en nuestros corazones.

Llueve llueve y como siempre no a gusto de todos. Llueve llueve y mientras nos mojamos como tontos. Llueve llueve y en un simple charco a veces nos ahogamos.

Me olvidaré de tu amor de garrafón me olvidaré de tus besos de Judas, hoy voy a darle a mi pobre corazón un par de capas de alguna pintura que borre las humedades que le han dejao tus recuerdos.

Tú subes como la marea yo bajo como la tensión, pa mi es como un rompecabezas lo que pa tí cae de cajón.

Tengo una vena averiada en el corazón que está muy mala y se cargaa cuando te veo mi amor.

Ya se que esto es ley de vida pero más bien es vida sin ley.

Me pide Dios que arregle cuentas con mi pasado lo llevo a cuestas.

Te di besos hasta los huesos pero tú no quisiste más, te di besos y lo que tú querias era cash.

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